Entradas

100.

Llevo cuatro meses trabajando. Estoy haciendo cursos nuevos, nuevas tareas y dejando a gente atrás, como Ana, y más de 99 hombres... Porque llegué a los 100, un día antes de que hiciese un año, de hombres con los que me he acostado y he sido amante. Y he hecho cosas feas y no he sido siempre buena, y me porté mal pero también dejé a hombres maravillosos (al menos en la cama y en lo que conocí) escapar..  Pero ha cambiado todo.  Mi nueva pareja, con la que llevo 3 meses y 2 semanas, y yo ya hemos hecho el pacto de sólo estar juntos y ser fieles, de tener espacio, de ir poco a poco, pero con sexo. No nos vemos todos los días, pero puedo estar tranquila, y el también. Y, aunque puede resultar de película, le he contado a mi nuevo novio que me acosté con 100 hombres en un año, y él me dijo que lo mismo, pero en su caso 150 mujeres,  años atrás, tras su divorcio. No tiene hijos. Y que el sexo es importante, pero no para tanto, y lo mismo digo, pero con el es fantástico, y, aun...

99.

David ya se ha ido. Me ha dejado su número, escrito. No ha desayunado, sólo me hacsusurraso que llegaba tarde, pero no sé dónde. Ni con quién. Ha sido formidable. Nunca nos acostamos juntos, pese a que tuviésemos nuestros juegos, pero está vez sí. Cómo una quinceañera, como una primera vez, dulce, tierno, apasionado... tal y como lo soñé hasta que me dejó por aquella pelirroja sofisticada, con la que casi se casa. Desayuno, antes de ducharme. Y veo un mensaje de la app. Apago. Ya cierro. Ya no más. Ya estoy cambiando de vida. Ya quizás... Y recibo un mensaje: - Perdona, pero mi ex mujer me ha llamado y tenía que ir a buscar a la niña, que volvia de viaje y ella está con jaqueca. Voy a tenerla unos días, si te parece, te veo el sábado, y vamos a otro concierto. Pero no sé si voy a querer ir siempre de conciertos, y verle, y seguir... Tengo dudas... Quizás ayer fue formidable, un éxito, pero seguir... Y no porque tenga hijos, es que... Recibo otro mensaje: - Sesión de fotos conmigo.- Est...

98.

La segunda semana de nuevo trabajo, y feliz. Este fin de semana he conseguido ser elegida como extra de público en un programa,y estoy contenta. Bien vestida yaquillafa, tomo asiento. A mí lado, un ex presentador de la cadena. Hablamos, y tenemos muy buen feeling. Me da su teléfono, y lo guardo, enviándole un mensaje para que tenga el mío. - Tomaremos algo- dice, al salir. Me dirijo a casa pero paso por el bar, con nostalgia, donde un día entré en un camerino. Hay concierto, pero no conozco el grupo. Cantan versiones, y escucho "Maggie" de MClan. Aún recuerdo la portada en el supermercado Pryca, en los discos rebajados. Y veo a un hombre que me resulta familiar: - ¿Te acuerdas de mi? Y sí, me acuerdo del chico que tocaba el bajo, a veces, cuando éramos novios en el instituto, y le beso, con pasión, y, tras una charla y el concierto, le invito a subir a mí casa, a dormir.

97.

Es sábado por la mañana, y me llaman del modelaje. Está vez, Esteban. - ¿Te vienes a hacer un posado para un amigo mío especial? Y pienso que sí, me pienso que es disminuido, con lo de especial, y... resulta que, entrando con la puerta abierta y sin que ellos lo sepan, veo que se besan,. Me pillan, y me explican es su amante. Qué no diga nada, por favor, que Esteban se plantea este hombre que es más serio y agradable. Entra otro chico, un modelo. Quieren que posemos juntos, como en la estatua de Apolo y Dafne. Y lo hacemos. Siento que me mira mucho, y hay química. Cuando acaban, nos piden que, si es posible, hacer una sesión, pero de fotos, haciéndolo, que nos pagan un extra. Mejor en fotos, para los dibujos, que será un cómic. Y no me sabe mal, y aceptamos...

96.

Empiezo el trabajo. Mucho ajetreo, mucho estrés, mucho aprendizaje... Pero feliz. Triste aún por lo de José, no quiero seguir pensando. El trio de ayer me dejó cansada, y el trabajo de hoy, más, con lo que hoy ya será un día de merecido descanso. Paso la semana. Todo es diferente, el trabajo, horarios, y hasta como más. No tengo más compañeras que dos enfermeras mayores, una casada con hijos y la otra lesbiana, y comemos juntas siempre. Me han aceptado, y me ayudan. Llega el viernes, pero no quiero salir. Ha quedado atrás la oficina, Ana y... José. Estoy triste aún, parecía que iba a ser serio. También pienso que puede que acabe sola...Pero tengo un reto por cumplir, antes de habituarme demasiado a una nueva vida, en la que quiero aprender sobre la materia, realizar nuevos estudios, y más propósitos, pero antes, quiero terminar con esto...en un fin de semana. Y vuelvo a abrir la app, y chateo haciendo sexting, con el segundo que me escribe ya que el primero, no...

95.

Mañana empiezo el trabajo pero el chico del último posado, me llama. Debería de ir que no, que me ha dejado mi novio, que estoy deprimida, que me he portado mal, pero...voy. Sé que me hará reír, sl menos y quizás... Como si no hubiese hecho nada en mil años... Y cuando llegó: - Te presento a mí novio Esteban. Y, sin negarme, tras una presentación y charla, me monto un trío con los dos, en la que besar, penetrarme y jugar con mi cuerpo es el foco y juego alque quieren jugar...

94.

Vuelvo a casa. Me ducho. Me pongo pijama. Pongo la televisión, tomándome un café, y pensando qué hacer. No puedo irme de viaje con José. No puedo seguir con José. No puedo decirle lo que he estado haciendo. Había empezado muy bonito, pero he perdido ante mí misma: sin ser fiel, no puedo continuar. No sé lo merece. Si el se hubiese portado mal. Quizás ha estado con alguien más. Pero sé, que desde que está conmigo, no. Y no puedo seguir. Le llamo. Qué viene. Sí, tiene algunas cosas. Y cuando pienso que quizás yo me precipito, me tenía que haber aguantado y no decirle que no puedo estar con él ya que no ha sido el único estos días, veo que, enfurecido, me mira con enojo, recoge lo suyo y se despide: - Ya no vamos a ir de viaje. Borra mi número, creo que no me merezco esta desconsideración ni desprecio, ni falta. Me siento engañado, casi usado... Creía que eras otro tipo de personas... Y cierra, con lágrimas en la cara, y sé que no volverá. Y tiene razón, no sé lo merece, y me pongo a llor...