64.

Tras la ducha, nos vestimos y tomamos el café con las cupcakes. Ha sido perfecto... Me ha encantado: dulce, salvaje, sexy, entregado... Estoy en un sueño. Y, sí, hablamos de trabajo, películas y viajes. Me voy la semana que viene a Londres, una semana y...

- Ay, perdona- vibra su teléfono. - Vaya, mi novia me requiere... 

- ¿Tienes pareja?

- Sí, no es formal del todo, pero... 

- No estás sólo.

- No, yo nunca estoy sólo. Desde los 15 años, jamás he estado solo...

Y me entristezco. Lo nota. Cortes, se despide. Y, cuando cierra la puerta, rompo a llorar.

Al rato, más tranquila, veo un mensaje:

- Soy Diego (app)..Qué te parece si tú y yo tenemos conversaciones salvajes...

Y dejo que hable, diga, se excite, pero cuando me toca a mí, cuelgo y bloqueo, y vuelvo a llorar.

Pero antes de dormir:

- Soy Eric. Siento no haberte dicho nada de la pareja, pero no estamos comprometidos, y si algún día quieres volver a verme, estaré encantado. Me has gustado mucho.

Y, sin querer controlarlo, sonrío.

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